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jueves, 11 de junio de 2015

“Por qué dejé de ser masón” de Serge Abad


Del libro de Serge Abad que desvela la relación entre el Gobierno francés y la masonería



por Luis Antequera


Recientemente he tenido el placer traducir el libro editado por Libros Libres titulado “Por qué dejé de ser masón” de Serge Abad, francés de origen español como delata su apellido… y ex masón. Un libro interesantísimo gracias al cual no sólo aprenderán Vds. muchas cosas sobre las interioridades de la masonería, sino en el que encontrarán Vds. importantes revelaciones.

Entre las muchas realizadas, me llamó poderosamente la atención la que trascribo aquí para Vds., cuya veracidad remito al escrito de mi traducido y a las fuentes de las que éste se vale, entre las cuales, notablemente, a Sophie Coignard, Le Point de 3 de enero de 2013:

“La influencia de la francmasonería, sobre todo en el seno del precedente gobierno socialista, es algo más que una hipótesis, siendo así que tres de cada cuatro ministros eran masones, ratio digno de los mejores tiempos de la III República, porcentaje jamás igualado en tres decenios, quizás en más de un siglo, dentro de un gobierno. En el seno del gobierno de Jean-Marc Ayrault, cabe remarcar que Victorin Lurel, ministro de Ultramar, Alain Videlies, ministro delegado encargado de las relaciones con el Parlamento, Jean-Yves Le Drian, ministro de Defensa, eran masones del Gran Oriente de Francia; y Stéphane le Foll, ministro de Agricultura, también lo sería. Anne-Marie Escoffier, ministro delegado encargado de la descentralización, era miembro de la Gran Logia Femenina de Francia. Manuel Valls, ministro del Interior –y actual Primer Ministro- ha sido miembro del Gran Oriente, algo que, con ocasión de mi estancia parisina y de mis visitas a las logias francilianas [toponímico de la Isla de Francia], me aseguró un francmasón del Gran Oriente que era, a su vez, uno de sus colaboradores. Por lo que hace a otros ministros que no serían francmasones o que niegan serlo, como es el caso de Christine Taubira, persiste la duda, pues si por un lado algunos hermanos y hermanas me han afirmado que “lo es” (concretamente en la GLFF) [acróstico de Grand Loge Féminine de France (Gran Logia Femenina de Francia)], por otro, con ocasión de su venida a Narbona a una logia del Gran Oriente, no llevaba señal alguna y participó en una tenida blanca cerrada, lo que permite aceptar que “no lo era”… o bien que no quería desvelar su pertenencia. Aparte de ello, son numerosos los consejeros de ministros o miembros del gobierno precedente de Ayrault que eran, también, masones”.

Y bien amigos, que hagan Vds. mucho bien y que no reciban menos. Mañana sigo esperándoles por aquí.


©L.A.
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