Axel Kicillof ambiciona ser el Roque Fernández de Cristina
Algunos políticos que entienden poco afirman que Cristina Fernández de Kirchner sigue siendo el personaje más poderoso de la política argentina, y que ella conserva la iniciativa.
No es cierto. Cristina acumula una debilidad peligrosa que se manifiesta en una realidad: ella ya no consigue evitar ni anticipar las riñas domésticas en su equipo de colaboradores. Desde Horacio Verbitsky que se queja que la 'comunidad de inteligencia' está fuera de control a Amado Boudou que denuncia que lo 'matan' desde adentro del gabinete nacional.
Pero lo más importante en el punto de partida del análisis del conductor Chiaruttini, por AM El Mundo, consiste en que Axel Kicillof se encuentra lanzado a conseguir financiamiento externo para financiar lo que queda de la Administración Cristina, y ha renunciado a cualquier corrección fiscal. Es evidente que intenta imitar a Roque Fernández cuando Carlos Menem ya no obtenía la re-re pero había que concluir el mandato presidencial.
De todos modos, la situación guarda no menos de 4 diferencias:
- La Convertibilidad, que no había sido violada.
- La armonía entre Roque Fernández y Pedro Pou, presidente del BCRA por entonces.
- La seguridad jurídica argentina para con los acreedores en ese período.
- Miguel Kiguel como secretario de Finanzas, recurso humano del que carece Kicillof.
Es obvio que las diferencias conducen a un elevadísimo costo de cualquier financiamiento nuevo externo. Es un tema muy delicado y que habrá que considerar en breve. Aquí el texto de Chiaruttini:
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.... curiosamente, el kirchnerismo, primero con Guillermo 'Lassie' Moreno y, ahora, con Axel Kicillof, han destrozado los motores impulsaron en el pasado el consumo y la producción. El quiebre fueron las retenciones, desde entonces, todas las plagas desatadas en la economía argentina salieron de la galera de la Casa Rosada o del Ministerio de Economía.
El mercado inmobiliario se destrozó por forzar la pesificación del sector, el turismo agoniza por el cepo cambiario, el automotriz sucumben por una suba inútil de impuestos, la industria se derrumba por un inservible freno a las importaciones y el campo pierde oportunidades por la manipulación de precios y producciones que se realizaron con la excusa de bajar los precios. Y, en el camino, la inflación se espiralizó. Todo pérdidas, nada de ganancias. Como se ve, un camino suicida.
Y el círculo se completa: Néstor Kirchner y, sobre todo, Cristina Fernández han tenido debilidad por sus ministros de Economía.
El primero, envidiaba la imagen y prestigio que tenían.
La Presidente de la Nación, por premiar y catapultar a quién le facilita dinero para despilfarrar.
Y así, el kirchnerismo, que se catapultó y consolidó en el poder por “la caja”, hoy tambalea y se debilita por hacer malabares para mantener funcionando esa misma “caja”. Amado Boudou es la cara del fracaso político del kirchnerismo, pero será Axel Kicillof será su ejecutor.
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.... curiosamente, el kirchnerismo, primero con Guillermo 'Lassie' Moreno y, ahora, con Axel Kicillof, han destrozado los motores impulsaron en el pasado el consumo y la producción. El quiebre fueron las retenciones, desde entonces, todas las plagas desatadas en la economía argentina salieron de la galera de la Casa Rosada o del Ministerio de Economía.
El mercado inmobiliario se destrozó por forzar la pesificación del sector, el turismo agoniza por el cepo cambiario, el automotriz sucumben por una suba inútil de impuestos, la industria se derrumba por un inservible freno a las importaciones y el campo pierde oportunidades por la manipulación de precios y producciones que se realizaron con la excusa de bajar los precios. Y, en el camino, la inflación se espiralizó. Todo pérdidas, nada de ganancias. Como se ve, un camino suicida.
Y el círculo se completa: Néstor Kirchner y, sobre todo, Cristina Fernández han tenido debilidad por sus ministros de Economía.
El primero, envidiaba la imagen y prestigio que tenían.
La Presidente de la Nación, por premiar y catapultar a quién le facilita dinero para despilfarrar.
Y así, el kirchnerismo, que se catapultó y consolidó en el poder por “la caja”, hoy tambalea y se debilita por hacer malabares para mantener funcionando esa misma “caja”. Amado Boudou es la cara del fracaso político del kirchnerismo, pero será Axel Kicillof será su ejecutor.
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