Internas por la eternidad
Tanto se erosionan las palabras para despojarlas de su identidad que hoy parecen vacías de todo significado, de esa manera, habiendo perdido su significación, dejan de importarles a todos. Cuando libertad o democracia no son distintas a una sopa de letras ¿quién se jugará por ellas?
En cierto modo a nadie le preocupa la democracia porque pareciera algo viejo, dado de baja. Tampoco logran comprender el sentido de alternancia porque consideran al poder como patrimonio personal. Un patrimonio de esos que se incrementa en más de un 150% anual. El gobierno del pueblo es una falacia. El gobierno es deEW quienes se han hecho de los recursos del Estado y los utilizan para comprar votos y voluntades.
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